Argumento:
Tintín, el capitán Haddock y el profesor Tornasol se dirigen
a Sídney para participar, como invitados especiales en una
conferencia internacional sobre astronáutica. Mientras se
encuentran en el aeropuerto de Yakarta (Indonesia) esperando
su vuelo para Sídney, se encuentran con Piotr Pst, a quien
habían conocido en una aventura anterior, recogida en el
álbum Stock de coque. Pst trabaja ahora como piloto del
excéntrico millonario Laszlo Carreidas. Este último invita a
los tres protagonistas a viajar con él a Sydney en su avión
privado. Sin embargo, el secretario de Carreidas, Spalding,
y dos de los miembros de la tripulación del avión son parte
de un complot para secuestrar el avión y desviarlo a una
isla volcánica en el océano Índico, donde tiene lugar un
accidentado aterrizaje. Tintín, Haddock, Tornasol y Pst son
apresados; Milú logra escapar, pero es tiroteado por los
secuestradores y los demás lo dan por muerto. Más adelante
se descubre que detrás del secuestro del avión está el
malvado Rastapopoulos, que pretende hacerse con la fortuna
que Carreidas guarda en un banco suizo. Allan Thompson es el
lugarteniente de Rastapopoulos. Tintín, Haddock y Tornasol
han caído en sus manos por una causalidad, ya que
Rastapopoulos ignoraba que viajaran con Carreidas.
Aprovechando la circunstancia, sin embargo, Rastapopoulos
planea acabar con sus vidas para vengarse de las derrotas
que le han infligido en anteriores aventuras. Los
protagonistas son recluidos en un antiguo búnker japonés de
la Segunda Guerra Mundial. Carreidas es llevado a otro
búnker, donde Rastapopoulos ordena al maligno doctor
Krollspell (el nombre está posiblemente relacionado con el
del médico nazi Theodor Morell; Kroll puede aludir también
al teatro de la ópera berlinés en que tenían lugar las
reuniones del Reichstag nazi) que inyecte a Carreidas un
«suero de la verdad» de su invención. El producto tiene
demasiado éxito, ya que Carreidas empieza a confesar todas
las maldades que ha cometido desde los cuatro años, pero no
da a Rastapopoulos la información deseada. Accidentalmente,
el doctor inyecta al exasperado Rastaopoulos una dosis de su
suero. Entre tanto, Tintín, Haddock, Tornasol y Pst logran
escapar del búnker en que habían sido encerrados, con ayuda
de Milú. Se dirigen al lugar en que se encuentra Carreidas.
Rastapopoulos, a causa del suero de la verdad, confía a
Krollspell que tenía la intención de eliminarle en cuanto
dejase de serle útil. Tintín y sus amigos irrumpen entonces
en el búnker y capturan a Krollspell y a Rastapopoulos. Sin
embargo, Rastapopoulos logra escapar cuando se le pasa el
efecto del suero, se reune Thompson y emprende la
persecución de Tintín y sus amigos. Guiado por una extraña
voz en su mente, Tintín descubre, oculta en una extraña
escultura que representa la cabeza de un astronauta, una
entrada secreta que lleva al interior del volcán. En el
interior del volcán, Tintín y sus amigos conocen a un
extraño personaje, Mik Ezdanitoff, que les revela que está
en contacto con una cultura extraterrestre y que les ha
atraído hasta allí mediante telepatía. Entre tanto,
Rastapopoulos y sus hombres descubren la entrada, pero no
logran abrirla, por lo que utilizan explosivos. Ezdanitoff
explica que la explosión va a producir la erupción del
volcán, por lo que deben dirigirse al cráter, donde podrán
recibir ayuda de los extraterrestres. Emprenden la marcha
hacia allí por pasadizos subterráneos, perseguidos de cerca
por Rastapopoulos y sus hombres. Tras llegar al cráter,
Ezdanitoff hipnotiza a los protagonistas, que suben a bordo
de un platillo volante creyendo estar embarcando en un
avión. Poco después, los extraterrestres los dejan en medio
del océano en una balsa. Rastapopoulos y sus hombres, en
cambio, son recogidos por los extraterrestres, también bajo
hipnosis, y no vuelve a saberse nada de ellos. Cuando un
avión recoge a Tintín y sus amigos, ninguno de ellos (a
excepción de Milú) recuerda lo ocurrido desde el momento en
que embarcaron en el avión de Carreidas. Sin embargo, el
profesor Tornasol conserva un tornillo hecho de un metal
desconocido. En la última viñeta, Tintín, Haddock y Tornasol
embarcan en el vuelo para Sídney, como tenían previsto. |